También conocida con el nombre de Tlachihualtépetl, del náhuatl “Cerro hecho a mano”, la pirámide de Cholula es considerada la más grande del mundo en base. Su gran volumen es resultado de la superposición de otras pirámides, ya que la más antigua se cubría en su totalidad para dar paso a una nueva construcción, lo que provocaba que la base fuera creciendo hasta conseguir su actual tamaño: 450m de largo por lado, 65m de altura y cerca de 4.5 millones de metros cúbicos que ostenta.
Tlachihualtépetl, originalmente templo de Chiconaquiahuitl, Dios de las nueve lluvias, fue construido entre 500 y 1000 años. Y a la llegada de Hernán Cortés, se edificó en su parte más alta una iglesia en honor a Nuestra Señora de los Remedios. Sin embargo, gracias a investigaciones como las de Adolf Bandelier, Louis Henry Morgan y el arquitecto Ignacio Marquina, pusieran lo que pusieran para ocultarla, hemos podido conocer más de este monumento y nuestra historia.
Muchas preguntas siguen oscilando alrededor de este asentamiento prehispánico: ¿En cuánto tiempo se construyó? ¿Quién la mandó construir? ¿Cómo pasó de deidad a deidad? Pues yo me sumo a las interrogantes pero con una interesante respuesta: ¿Cuál hubiera sido su valor de construcción aproximado en nuestros días?
Comencemos por el sistema constructivo. Como se observa en el interior de los túneles y algunos de los núcleos de las estructuras de las zonas arqueológicas, los edificios cholultecas fueron construidos utilizando adobes para formalizar el núcleo y piedra caliza para los recubrimientos de áreas de mayor carga. Aplicaban una capa de estuco y sobre ella la decoración pintada o grabada que hacía resaltar los templos y plataformas.
El adobe era fabricado utilizando arcilla de los alrededores. La piedra caliza debió ser traída de la región de Tepeaca, Tecali de Herrera o Izúcar de Matamoros, ya que en el área de Cholula no existe. Para el estuco (pasta de grano fino compuesta de cal apagada, mármol pulverizado, yeso y pigmentos naturales que se endurece por reacción química al entrar en contacto con el hidróxido de calcio de la cal y el dióxido de carbono), se utilizaba arena volcánica de la región de San Buenaventura Nealtican, próxima a los volcanes.
Cuantificación. Los criterios generales considerados fueron:
- Periodo de ejecución de 750 años, promediando los años que la historia indica.
- También, un promedio entre etapas de 107.14 años, ya que la pirámide se construyó en 7, y asumiendo que cada etapa fue terminada.
- Con base en datos constructivos típicos de la época, el relleno se consideró como una mezcla de tierra y piedra en proporción del 70% – 30%. Las caras exteriores de piedra maciza, y estucos sólo en taludes y tableros. No se consideró en el planteamiento presupuestal el costo de las pinturas por no tener certidumbre de áreas.
Entonces, aquí nuestro planteamiento presupuestal aproximado: $100,862’589,971.73 en un período de ejecución promedio de 750 años, lo que da una inversión anualizada de $134’483,453.30; lo que equivaldría al 3.4% del presupuesto anual del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) este 2020.
¿Te gustaría saber más? A continuación podrás encontrar con mayor detalle las cantidades de obra.
-Efraín de los Santos
FOTO: Rulo Luna Ramos
2 comentarios
Gracias por compartirnos tu visión y tu motivación Felipe. Abrazos. Escab 🤗
Gracias a ustedes por ser parte de este sueño que ya hoy, es una realidad.